Ocho y pico de la tarde, la 2 de Apolo estaba llena a petar para disfrutar de Dead Daisies, primera banda de la noche. Personalmente yo estaba muy seguro de lo que me iba a encontrar porque tuve la oportunidad de ver a estos grandes músicos del rock ‘n’ roll de los 80 como teloneros de Kiss en el Palau Sant Jordi en 2015, un concierto que recuerdo bien. Aunque lo que me iba a encontrar fuera un show mucho más preciso y energético.

La banda formada actualmente por John Corabi (ex Mötley Crue), Doug Aldrich (una leyenda que ha formado parte de Dio o Whitesnake), Marco Mendoza (ex Thin Lizzy), Brian Tichy (ex Whitesnake) entre otros, es un estandarte de clase y habilidad con cada instrumento que tienen entre manos. La sala pequeña les favoreció mucho, creando un ambiente underground que les dió más cercanía con el público. El escenario era bajo y los músicos podían tocar al público en cualquier momento. Vuestro reportero, en busca de alguna sonrisa de complicidad, se encontraba delante de Doug Aldrich, un monstruo de la guitarra. Mi posición me ayudó a pedirle una púa con carita de pena, me la dio en la mano y, así, amigos, me ahorré tener que pelear con la gente cuando tirase otras al público.
Entraron con ‘Long Way to Go’, una de sus mejores canciones, que corresponde su habitual inicio, de una energía apabullante y con un solo destacado de mi amigo Aldrich, que marca la diferencia en toda canción de los estadounidenses.
En ‘Mexico’ y ‘Make Some Noise’ el rock ‘n’ roll no cesa y suena muy potente y lleno pese a recurrir a temas bastante estereotipados y letras no demasiado elaboradas.
Cabe recordar sobretodo ‘Song and a Prayer’ que es probablemente una de sus mejores canciones, muy coreable, cosa que hizo que tuviera una buena aceptación entre el público. La voz de John Corabi, el bajo de Marco Mendoza y la batería de Brian Tichy sobresalen en esta canción. Después de un motivante solo de batería de Brian Tichy, Marco Mendoza saludó a sus «hermanos de sangre castellana» en su lengua materna, diciendo que siempre tienen grandes amigos en Barcelona.

Ver a Dead Daisies es disfrutar de leyendas del rock, con tablas y experiencia de sobras, un espectáculo interesantísimo, pero tienen una pega clara: sus canciones son algo genéricas. Habrá quien piense diferente que yo, pero este supergrupo no ha creado nunca canciones tan recordables como las bandas de las que provienen, pese a hacer un hard rock divertido y que brilla en directo.
Puede que ellos sean conscientes, puede que no. Pero las canciones que más brillaron entre el público fueron ‘Fortunate Son’, ‘Join Together’, ‘Helter Skelter’… versiones de clásicos del género interpretadas por los grandes músicos que teníamos la suerte de tener encima del escenario.

Mi expectación personal por the Answer era realmente alta. No había tenido la oportunidad de ir a uno de sus shows y es una banda que he disfrutado desde que la descubrí, enmarcando su álbum debut ‘Rise’ y ‘New Horizon’ con temas que están entre las mejores canciones de rock de este siglo. Con su nuevo álbum ‘Solas’ la banda se ha renovado, incluyendo una mayoría de buenos temas de folk irlandés, combinado con la esencia del rock más clásico de la banda.
El inicio con ‘Solas’, tema homónimo de su último álbum, místico, casi espiritual, esta realmente muy alejado de la banda de Hard Rock que solían ser y en parte son.
‘Beautiful World’ otro tema del álbum, es una canción que te va gustando más cuando más la escuchas. En directo me dejó un poco frío pero el crecimiento de la potencia de las dinámicas del tema y la gran voz de Cormac Neeson, casi al nivel de vocalistas como Robert Plant lo hace un tema redondo. El final es una pasada, con una nota extensa que resuena por todas partes, pese a que en directo no impacte tanto como en el álbum y pierda un poco.
Todos estábamos deseando ya un poco de caña y el Hard Rock se su época ya pasada empezó con ‘New Horizon’, un tema homónimo de su anterior álbum, que no es uno de los mejores temas de ese álbum pero nos movió bastante. Siguieron canciones como ‘Demon Driven Man’, uno de los pocos temas de rock ‘n’ roll puro de su nuevo álbum ‘Solas’, ‘Waste Your Tears’, tema inicial de su tercer álbum, para volver a su nuevo trabajo con ‘Untrue Colour’ un mediotiempo bien orquestrado. Cada tema sonó espectacularmente, pero el orden de la setlist de los norirlandeses y la cantidad de temas de ‘Solas’ contrastó exageradamente con el concierto de Dead Daisies, creando un ambiente mucho más tranquilo.
The Answer no es una banda muy habladora, pero defienden toda explicación de cada canción, demostrando la importancia que adquiere el mensaje de los temas para ellos. Este cariño se notó en ‘Tunnel’, otro lento de su folk, con mucha sensibilidad y buen gusto y un acertado solo de guitarra de Paul Mahon adornado por unos coros místicos. ‘Thief of Light’ también conformó un momento precioso, donde nos transforman a su Belfast, a la música de su nación, de su tierra.
Demon Eyes fue la totalidad del parco repaso que dieron a su segundo álbum ‘Everyday Demons’. Con un temazo como ‘Spectacular’ estas dos canciones fueron, en mi opinión, el punto álgido del concierto. El final con ‘Battlecry’ fue realmente profundo, pero a muchos nos supo más que a poco.
Parece que The Answer reniegan bastante de su pasado más duro y solo miran hacia delante. Siempre han sido una banda que se centra en el futuro y en ir cambiando su sonido e innovando con sus creaciones, pero su directo actual, con exceso de temas de su último álbum, no parece dar una idea amplia de quien han sido como banda sino de quien son actualmente. Grandes éxitos como ‘Under the Sky’ o ‘Never Too Late’ entre otras, probablemente de sus temas más importantes, fueron dejados de lado esa noche. No recordando ni una sola canción de su debut. Acabaron dejándose en el tintero temas tan increíbles como ‘On and On’ o ‘Nowhere Freeway’, pese a que esta última no la suelan incluir habitualmente en sus espectáculos. Los de Downpatrick son una gran potencia musical: grandes músicos y gran sonido, pero tuvieron falta de efectismo para conseguir un show redondo.