¿No os da rabia cuando la gente se empeña en decir que “este grupo son los nuevos Led Zeppelin”? O que Bruno Mars es el nuevo Michael Jackson. O que Olivia Rodrigo es la nueva Hayley Williams. O que…
Parece que, en el mundo de la música, es imposible decir algo bueno de un nuevo grupo o artista sin mirar al pasado. Estos chicos madrileños suenan mucho a “la movida”. Este nuevo rapero se parece a Eminem. Este chico es el nuevo C. Tangana.
¿Y si, simplemente, los nuevos talentos son estrellas en sí mismos? ¿Y si les dejamos por fin despegar?
Y de esto nos damos más cuenta cuando escuchas a un artista y no sabes bien cómo definirlo a alguien que no lo conoce. ¿Suena parecido a alguien? ¿Suena propio? ¿Cuál es su género? ¿Tocará llamarle trap (algo que parece que se ha convertido en el género comodín para cualquier tipo de música urbana) o es algo más?
¿Cómo le explico a alguien lo que siento cuando escucho a Rojuu si nunca lo ha escuchado?
Para quien no lo conozca, Rojuu es un joven artista de Barcelona que siempre ha coqueteado con sonidos de todo tipo en su música y, gracias a su actitud no sólo en sus temas, también en sus redes, ha conseguido ser un fenómeno entre el público más joven de la música hispana.
Por ejemplo, Rojuu tiene uno de los perfiles de TikTok más interesantes que he visto nunca, donde habla de sus hobbies y su día a día, enseñando dibujos, algunos de los cómics o mangas de su colección o sus pensamientos en general en la red social con mayor proyección del momento y de la que ya contamos su impacto con respecto a la música.
Personalmente el proyecto personal de Rojuu siempre me ha llamado poderosamente la atención y le he seguido muy de cerca, con tan solo 16 años ya sacó Bad Trip Camp (2019), un interesante álbum que me tuvo enganchado un buen tiempo, pero su evolución me empezó a llamar mucho más la atención con el disco OOO (2020) y, especialmente, con el single Ikari (2020), canción que lo tenía todo para gustarme: un buen beat, una letra triste y referencia a la serie Neon Genesis Evangelion (1995), mi anime favorito de toda la historia.
Me parecía que Rojuu era un artistazo con muchísimo talento por explorar y explotar, y esperaba ansioso su siguiente disco para ver si conseguía darme el click completo que me hiciera quemar un álbum suyo como creo que se merecía.
Entonces, llegó Roku Roku (2021)
Cuando escuchas música y un álbum te llega tan adentro como ha hecho Roku Roku conmigo al principio no te paras a pensar si es porque la música está genialmente hecha, si es por su letra, si es por el ambiente que crea, por el poder que tiene en ti… no lo piensas. Simplemente ese disco llegó a tu vida en el momento adecuado y de la manera adecuada.
Roku Roku es, en mi opinión, el proyecto más ambicioso de la carrera de Rojuu, no solo es su disco más largo (superando los 30 mins de duración), también es un disco que prueba y juega con todo tipo de elementos, pero siempre con una misma “vibra” que consigue ser el sello de identidad del álbum y que te hará saber identificar, a ciegas, que esa canción pertenece a Roku Roku y no a otro disco.
Rojuu también da la clave en cómo conseguir pegarte canciones en el cerebro como un chicle que nunca se va gracias a canciones como Slenderman, Pero No Importa, la popular Umi, o, mi personal favorita, Muy Lind4. Canciones que escucharás y que tendrás su estribillo en la cabeza durante mucho tiempo, por lo bien conseguida que tiene la sinergia entre beat y letra.
Roku Roku ha sido uno de los lanzamientos del año, uno de los discos más quemados por mi parte y un CD que me ha acompañado en los momentos más oscuros del año. Esas noches en las que sólo pensaba en ponerme los cascos, enchufar el disco de Rojuu y jugar League of Legends para desconectar de una vida que parecía complicarse por momentos. Una pequeña salida. Un oasis. Un lugar seguro.
Pero, si has llegado hasta aquí, quizá estés pensando… ¿a qué viene el titular del post? Tranquilo, eso empieza ahora.
Por qué Rojuu ya es el presente y el futuro de la música española. Y por qué 2021 ha sido su año
En un año en el que C. Tangana ha sacado El Madrileño, Axolotes Mexicanos se han lanzado a un nuevo disco interesantísimo o Love of Lesbian han sacado nueva música, decir que 2021 ha sido el año de Rojuu es una afirmación quizá demasiado poderosa para los ajenos a su música, pero es que este jovencito de apenas 18 años está poniendo patas arriba la industria musical. Ya no es proyección. Ya es una estrella.
Roku Roku ha sido un completo éxito en su carrera, con canciones superando el millón de reproducciones en Spotify y el single por excelencia, Umi, con más de 5 millones de reproducciones (y otros 2 millones más en YouTube), pero no ha sido el único éxito sin precedentes de Rojuu este año y es que el barcelonés se ha lucido en algo muy importante para la carrera musical de muchos artistas de hoy en día: las colaboraciones.
Tofu Delivery fue uno de los grandes bombazos que sacó Rojuu este año, una colaboración con el ex-youtuber y ahora artista Orslok, en el que fusionan eurobeat con momentos cogidos del trap y partes cantadas en las que Rojuu se sale especialmente. Casi un millón y medio de reproducciones en YouTube y más de 2 millones y medio en Spotify, Tofu Delivery se puede considerar un éxito absoluto en la carrera, no sólo de Orslok, si no también de Rojuu, que demostró poder moverse en otro estilo sin perder ni un ápice de su magnética personalidad musical.
Pero el gran día llegó hace casi un mes, cuando salió a la luz la colaboración de Rojuu con Amaia, una de las canciones más interesantes del panorama nacional y de las más emocionantes y mejor recibidas del año: Quiero Pero No fue otro examen de fuego para el artista barcelonés, que aprobó con nota moviéndose esta vez en un ambiente más indie y pop, donde demostró otra vez estar cómodo y seguir manteniendo fresca su fórmula y esencia. “Este chico tiene talento”, pensarían muchos, ajenos a la carrera de Rojuu. Muchos se animarían a darle una oportunidad a él y a su música. Muchos estarán ahora mismo escuchando sus últimos singles. Muchos se quedarán con él.
A estas colaboraciones se les podrían añadir otras que no destaco tanto pero también son importantes como Guts & Griffith de Sticky M.A. con Rojuu o One Last Kiss con Steve Lean además de singles propios que han cosechado un gran éxito como Un Paseo Más o la excelente Cuánto Tiempo Nos Queda. Todas excelentes canciones que sirven como dulce guinda al gran pastel que ha sido el 2021 para Rojuu.
El futuro es hoy. Se llama presente. Se llama Rojuu. Tiene 18 años y viene de Barcelona. Va a empezar a llenar salas. A petar festivales. A encabezar listas. El talento se hace de notar muy rápido.
No digáis que no os avisé.